En el año 2000, varios escritos de
Hannia Hoffmann y
Erik Diazserrano denotaron su huella de poesía fresca, con una
Hannia Hoffmann que en las portadas de sus libros ríe y sueña sin adornos publicitarios excepto en sus
libros corporativos que ambos escritores realizan para empresas mediante su producto estrella
"El Libro de su Empresa".
Fue en el inicio de la primera década del
Siglo 21 cuando en su país,
Costa Rica, gran parte de la población medianamente joven aún se reunía en fiestas improvisadas en sus casas de habitación cuando ya sus hijos no convivían entre ellos porque habían fundado nuevas familias lejos de sus progenitores.
La literatura de
Hannia Hoffmann y
Erik Diazserrano conlleva una marcada dosis de optimismo en medio de tiempos difíciles como consecuencia de alto desempleo y una economía débil y en crisis frente a una férrea unión de partidos políticos tras su beneficio económico en donde era obvio que las necesidades de los políticos, con pleno gozo de medios de comunicación, no eran las mismas de la ciudadanía.
Esa primera década del primer
Siglo 21 dejó atrás el glamour estilizado del siglo anterior y ambos escritores se convirtieron en cronistas con publicaciones en sus sitios web. Desde ese entonces, con su nueva y pujante editorial, aportan sentido alcanzable de la belleza literaria que es proclive a no poseer odios, rencores ni egoísmos, dado que sus publicaciones están orientadas a la docencia corporativa gratuita al alcance del público en general.
Sus escritos no reflejan una musa de moda centellante, sino una musa natural, muy real al entendimiento en sintonía con los lectores asiduos a sus revistas en Línea, cuya secuencia en sus muchos y variados escritos poseen su musa intercultural, fuertemente afirmada más allá de un momento en el tiempo.
La lecturas de los poemas de
Hannia Hoffmann son similares a ver personas en vivo que bailan y ríen en los campos y que, mesuradamente, el lector detiene en su pensamiento profundas o ligeras cavilaciones del andar en que se vive, que vivimos aún más acá de los albores de este
Siglo 21. Asimismo sus libros y sus realizaciones literarias escritas junto con
Erik Diazserrano reflejan, no sólo una nueva estética, sino también un cambio intercultural profundo propio de las personas que, en la segunda década del
Siglo 21, ya tienen o cuentan con sesenta o más años de edad.
Hoy observamos que fue un verdadero momento de transición porque marca el cambio de una subcultura que trasladó, su visibilidad, a puertas abiertas para un sector de jóvenes que encontraron, en esta nueva visión literaria, una nueva forma de ocio regenerativo al placer de leer para emprender sus propios escritos desde un punto de vista nuevo, propio del advenimiento muy a priori, de la tercera década del
Siglo 21.
Hannia Hoffmann en su poesía denota sentimientos muy amplios, mismos que crecieron fuera de circunstancias económicas y sociales sin dejar de convivir con la mundanidad de un país sumido en violencia política. Movieron desde entonces y mueven aún hoy, a sus lectores hacia una sensación de libertad y emprendimiento corporativo con escritos de
Erik Diazserrano tanto en libros físicos en papel como en sus web, que emanan estados de ánimo a manera de escape, de libertad en la naturaleza y gran sentido de posibilidades sociales, espirituales y económicas no agresivas, en parte por la expresión de sentimientos de amor y alegría en su pensamiento habitual.
Hoy, desde su
Taller Literario Hannia Hoffmann, personas obtienen asesoría con servicio editorial tanto en físico papel como en revistas y libros en
web. Es como si se tratara de nuevas y viejas generaciones saliendo adelante con nuevas ideas y actitudes propias de este nuevo conglomerado social costarricense, en las que son tan obvios como permisibles, estados de cambio desde la realidad a la autorrealidad de cada quien, con apoyo total de la más
alta tecnología que posee su propia sensación cinética que emanan sus propias
web.
El legado consiste ahora en poner en marcha un valioso aporte a la economía mediante la interculturalidad de la docencia y periodismo corporativo para buscar y lograr acuerdos de patrocinios y así crear y publicar
El Libro de su Empresa sin necesidad de pensarlo, afirman
Erik Diazserrano y
Hannia Hoffmann porque, estamos y vivimos en ello".
Oscar Aymerich, oscaraymerich@gmail.com