Poesía de máximas irreversibles (Eric Diazserrano)

Somos, cada uno de nosotros,
según nuestra herencia genética
y ambientes en que vivimos.
Las etapas de la vida conllevan
vivencias con sinos amenos,
hermosos o difíciles.
Todos somos diferentes,
cada persona es cada quien,
única en su tiempo-vida.
La vida dada es realizable
diariamente con recursos natos
circunscritos al entorno social
en máximas irreversibles,
preguntando, dialogando y,
tras alcanzar las síntesis,
analizamos, dejando atrás dudas
para materializar nuestro haber,
gratificante. No obstante, toda
persona sabe sobre su talento
o falta del mismo, así como capacidad
o discapacidad quien la posee;
en cada pernoctar y amanecer;
con ánimo de jugar con el viento
y ayudarse en vuelo paso a paso.