Bansbach; música, familia, empresa
Remembranza de don Rodrigo Blanco Odio cliente asiduo y gran amigo de los Bansbach
A Hans Bansbach lo conozco desde que recuerdo que nació un poquito después de que nací yo hace unos ochenta y tres años. Yo estudié en la escuela Buenaventura Corrales y recuerdo muy bien a su papá don Juan Bansbach Küpfer, toda una gran personalidad; un señor serio, de gran responsabilidad, un ejemplo de señor. Verdad.
Recuerdo que lo veía a través del ventanal de su pequeño negocio siempre famoso. Lo recuerdo con un acordeón sobre el mostrador, ahí arreglándolo, afinándolo. Y, bueno, un cuñado mío, Fernando Echandi, hablaba bellezas de don Juan. Porque él empezó estudiando acordeón. Un acordeón que le regaló su abuelito, que se llamaba don Laureano Echandi, y ahí fue donde Fernando empezó. Ahí le dieron sus primeras lecciones, ahí acudió a sus primeras clases de música.
Don Fernando Echandi, quien ya falleció, tuvo un conjunto musical por muchísimos años con el nombre "Conjunto Saint Francis". Yo entré a ese conjunto musical en el año mil novecientos sesenta y ocho cuando el grupo ya tenía unos cuatro años de existencia y recuerdo oír a Fernando contando anécdotas de don Juan. Por esos años yo estudiaba violín en el Conservatorio Nacional que no pertenecía a la Universidad de Costa Rica, era independiente. Mi papá me dijo: coja ese violín, ya está matriculado. Es un violín alemán que aún funciona, todavía, mi hermano lo tiene y lo toca de vez en cuando.
Con el paso del tiempo entré a estudiar en el Colegio Vargas Calvo y aunque Hans cursó ahí dos años no coincidimos como compañeros de aula. y así fui viendo poco a poco el local de Bansbach que fue creciendo... ya no era el local de tiempo idos, ya era más grande cuando aparecieron las flautas por el año de mil novecientos setenta y dos.
Entonces ya fuimos muchos quienes teníamos una flauta Yamaha y así, de pronto, ya me fui involucrando, de lleno, con Bansbach. Diay, yo tocaba requinto, entonces era cuerdas; después fue guitarras; mi primer bajo, porque yo trabajo el bajo. Recuerdo también a Wilmar, el hermano de Hans, que eran ellos eran socios y tengo de él un recuerdo lindísimo porque me dijo:
- Mirá, Rodrigo, tengo algo para vos. ¡Vení, subí! Y me tenía un micrófono alemán que era como un lapicero. Una cosa bella que fue mi gran chineado por mucho tiempo.
En una oportunidad, en la ciudad Naranjo, me tocaba a mí hacer como una escuelita para niños en riesgo que quisieran aprender a tocar guitarra. Se compraron doce de esas guitarras C40 que se han qudado para siempre.
Tengo una buena anécdota de cuando yo amenizaba musicalmente en los casinos del Hotel Irazú y del Hotel Balmoral. Recuerdo aquel día que llegué temprano a un ensayo previo y no me funcionó la planta. Entonces corrí a la tienda Bansbach y Hans me prestó un amplificador. Y me lo traje alzado al hombro y como pude lo metí al Balmoral y empecé con mis interpretaciones musicales justo a tiempo. Y me gustó tanto que me quedé con él. Y me dijo Hans:- No, traémelo porque ese es de exhibición. Entonces se lo devolví y él me dio uno nuevo.
Recuerdo una vez que necesitaba un aditamento especial para que mi guitarra sonara como guitarra y como órgano o flauta y Ronald Dotti Monge me dijo: en ese momento no lo tenemos pero de inmediato se lo traigo de Bansbach Nicaragua y me llegó al día siguiente porque lo trajeron en avión.
La escuela de Yamaha es la Escuela de Bansbach y mucha gente la conoce la escuela de Yamaha. Ahí compré un pianillo pequeñito de ochenta y ocho teclas Yamaha, y recientemente acabo de comprar una pianita también.
Ahora canto en misas porque ante el asunto del frenazo con la pandemia del Covid tuve que reinventarme y me fui por la música religiosa. Y sí... siempre he sido feliz de ir a Bansbach y sigo yendo ahí, a Bansbach. Antes todos los empleados me conocían y aún hoy algunos me conocen porque siempre me he sentido como en mi casa. Y, después, he cultivado una amistad muy bonita con Hans. Con el paso del tiempo muchos tiempo han venido y muchos tiempos más vendrán en las grandes vivencias musicales de los Bansbach y su Academia de Música Bansbach.