Proemio del libro Ensueño De Hannia Hoffmann En el preciso sitio, al justo tiempo, en esa edad primera, la luz iluminó el oscuro recinto de una manera nueva. Y los niños tomaron entre sus manos paletas y pinceles; los colores se fueron transformando y surgieron figuras de las líneas. Figuras y colores se fueron acoplando para formar imágenes y sombras, retratos y paisajes. Y los niños tomaron entre sus manos arcillas, piedras, troncos; para jugar con dimensión, con forma; para formar imágenes y sombras... Y los niños sintieron, expresaron; jugando, trabajando. La palabra se combinó en el ritmo hasta formar imágenes y sombras, para contar historias; palabras, gratos cantos de amores o recuerdos, de dolores o glorias; jugando con sonidos, armonías, con poesía , con música...
Y los niños sintieron, |